Luego de nuestro paseo en Ecuador, es en Colombia que nos encontramos, y más exactamente en Bogotá, la capital. Para contextualizar, es cuando mi mamá vinó a vernos en diciembre y enero que tuvimos la oportunidad de viajar por Colombia para descubrir juntos todos los destinos que les muestro ahora en el blog. Para nosotros, una etapa en Bogotá era indispensable, tanto para el descubrimiento de la ciudad que para conocer los primos bogotanos de Charles. Por cierto, nosotros 2, tuvimos la ocasión de irnos en octubre, para pedir mi visa.
Así que, por la primera vez de este viaje, hicimos el trayecto Popayán – Bogotá en avión. Lo que nos hizó evitar más de 15 horas en bus, puesto que el trayecto en el aire dura solamente 1h30.
Aquí está un resumen de los numeros lugares que hemos visto en una semana.
El centro histórico y turístico de Bogotá
La visita del centro histórico de Bogotá no se puede hacer sin conocer el famoso barrio de La Candelaria (que, geograficamente, incluye también la Plaza Bolívar y algunas calles que vimos justo más arriba). Su arquitectura colonial es muy reconocible y sus casas son muy inspiradoras. Se encuentran numerosos frescos y un ambiente artístico evidente. Es este barrio que fue la base de la fundación de la ciudad.
Todos los domingos y lunes festivos se organisa un gran mercado de las pulgas. El Mercado de las Pulgas de San Alejo rebosa de pequeñas maravillas. Hablando de eso, Charles encontró un reloj de bolsillo para su papá y soñamos juntos delante de los innumerables billetes y monedas del mundo entero para coleccionar. Se encuentran también antiguos muebles, libros, vinilos, etc. y de qué abastecerse si tenemos hambre/sed.
Una visita en Bogotá, o en una capital, pasa en general por museos. Durante nuestra estadía, visitamos 3. Estos 3 museos son gratís y me parece que los escogimos por este criterio!
Museo Botero: lo habíamos descubierto durante nuestra primera venida a Bogotá. Les refiero a este artículo si desean ver más fotos, especialmente las del patio de esta casa colonial que es realmente muy bonito.
Casa Museo Francisco José de Caldas: como su nombre lo dice este museo es la antigua casa de Francisco J. de Caldas, situada justo en frente al Palacio Nariño, la actual residencia del Presidente colombiano. Este científico, nacido en Popayán, es un personaje muy importante en la Historia del país. Él contribuyó al desarrollo científico y a la independencia de Colombia frente a la dominación española. Hoy, el museo expone objetos, escritos, libros que le pertenecían, y piezas más científicas como los planos de diferentes sitios de Colombia e instrumentos de medida. Sus trabajos de geógrafo, botanista, astrónomo, físico, periodista o militar son expuestos para entender más comó y porqué Francisco J. de Caldas se convertió en una figura de Colombia.
Museo Nacional de Colombia: el 3er museo que deseamos visitar nos retuvó casí 3 horas, con su multitud de obras. Efectivamente, ofrece una larga visión sobre toda la Historia de Colombia y también sobre los numerosos artistas pintores y escultores nativos del país. Además de eso, tuvimos la oportunidad de descubrir una exposición temporal, dedicada al pintor colombiano Omar Rayo y a sus figuras geométricas.
El Museo Nacional empieza por una gran sala dedicada a la civilización precolombina. Incluye una colección importante de vestigos de uso cotidiano y ritual, elaborados por los grupos que vivían en el territorio colombiano hace cerca de 12 000 años.
Las salas se suceden recordando la Historia del país. Se encuentran piezas de orfebrería encontradas durante excavaciones arqueológicas o que pertenecieron a próceres colombianos.
Los escultores y pintores de nacionalidad colombiana son también al honor en el Museo Nacional.
Nos falta todavía el famoso Museo del Oro de Bogotá a marcar en nuestra lista de deseos de visitas. Pero lo haremos la próxima vez.
¿Qué mejor revitalizarse dentro de espacios verdes cuando se encuentra en el corazón de una gran ciudad? Aquí está los 2 parques y jardines que tuvimos la oportunidad de descubrir durante nuestra estancia en Bogotá.
Jardín botánico José Celestino Mutis: este jardín de 19 hectáreas, y también centro de investigación, presenta la flora de las numerosas regiones y climas de Colombia. ¡Alberga también cerca de 5000 orquídeas! Cuenten con 2700 pesos (menos de 1€) para entrar pero vale la pena. Nos habríamos podido quedar todo el día.
Parque Metropolitano Simón Bolívar: ¡es el parque de los amantes del jogging! Hemos ido a los alrededores de las 8 de la mañana y este parque estaba lleno de deportivos madrugadores. Llamado “el pulmón de la ciudad”, está ubicado en el centro de Bogotá y ¡recubre 283 hectáreas! Una verdadera pausa verde en el tumulto de la capital.
Tomamos altura: la última vez, subimos a pie hasta la parte alta de Monserrate, este cerro que domina la ciudad de Bogotá. Recuerdo aquí. Esta vez, quisimos subir al monte en frente: el cerro de Guadalupe.
Después de una subida en carro, terminamos la ascensión de la cima de Guadalupe a pie para admirar la vista increíble sobre la ciudad. Un poco menos turística que su vecina, Guadalupe culmina a 3260 metros de altura, así que es mejor caminar lentamente para no tener el “soroche”. Una pequeña capilla (y su estatua de 15 metros) dedicada a Nuesta Señora de Guadalupe les acoge en la cima y los buses en dirección de Choachí paran en lo alto del cerro los domingos.
Espero que este tour rápido de Bogotá les haya gustado. El próximo artículo estará dedicado a 2 visitas que hicimos en los alrededores de la capital colombiana. ¡Hasta muy pronto!
Enlaces útiles para completar este artículo:
Barrio de la Candelaria y cerro de Monserrate
Museo del poeta José A. Silva y Museo Botero