Un desierto y una mina de sal a una hora de Bogotá!

Un día entero, es por lo menos el tiempo que se necesita para descubrir el pueblo de Nemocón. Situado a una hora de Bogotá en bus, esta pequeña ciudad y sus dos principales atracciones turísticas nos sedujeron, además eramos casí los únicos turistas!

Llegamos temprano por la mañana a la plaza principal de Nemocón. Con su iglesia, sus casas pintadas y la montaña alrededor, se sabe que estamos en un pueblo típico colombiano.

Nemocón significa “lamento del guerrero” en idioma chibcha, es en este lugar que los habitantes venían a llorar la muerte de sus jefes en el combate, desde el siglo VI a. de J.C.

iglesia en la plaza del centro de Nemocón
Iglesia San Francisco de Asís en la plaza central

escultura de una mujer en la plaza de Nemocón

muro ocre con dibujos de ángeles en Nemocón

casas en la plaza central de Nemocón

plaza de Nemocón con la iglesia al fondo

casas pintadas en una calle de Nemocón

casa de piedra en una calle de Nemocón

calle del centro de Nemocón con vista de la montaña

Después de nuestro paseo en las calles de Nemocón, nuestras visitas turísticas pueden empezar. Iendo a la mina de Sal, descubrimos que el lugar albergaba también un museo de historia natural (en renovación este día).

mammouth au musée d'histoire naturelle de Nemocón

A falta de visitar el museo, nos dirigimos hacia el objetivo de nuestra venida: la mina de Sal. Algunos meses antes, visitamos la catedral de Sal, ubicada en Zipaquirá, la ciudad vecina. Como su nombre lo indica, la catedral de Sal es muy orientada hacia la religión, cosa que menos encontramos en la mina de Sal de Nemocón, lo que dejó parecer más su sencillez y su autenticidad. Después de haber pagado 20 000 pesos cada uno (6,50€), seguimos nuestro guía, y los poquitos otros turistas del día, para una visita de una hora a 80 metros bajo tierra.

escultura de un obreo en la mina de sal de Nemocón

agua y túnel en la mina de sal de Nemocón

esquina y agua en la mina de sal de Nemocón

muro de sal cristalizada en la mina de sal de Nemocón

detalles de la cristalización de la sal en la mina de sal de Nemocón

muro de sal con luz azúl en la mina de sal de Nemocón

estalagmitas de sal en la mina de sal de Nemocón

Durante nuestra visita, el guía nos explicó la historia de la mina, el trabajo de los obreros, la formación de la sal… Pero también la historia de un rodaje de una película, que tuvó lugar en parte al interior de la mina: “Los 33”, la verdadera historia de los 33 mineros chilenos que quedaron prisioneros más de 2 meses bajo tierra después del derrumbe de la mina donde trabajaban. Hemos escuchado hablar de esta película al momento de su salida y sobretodo de esta increíble historia relatada en los medios en 2010. Así que esta visita a la mina de Sal, lugar de rodaje, nos dió ganas de ver esta película! Una vez regresados de nuestro gran viaje, lo vimos y los recomendamos fuertemente!!

cápsula Fénix 2 utilizada en la película "Los 33" en la mina de sal de Nemocón
La cápsula Fénix, utilizada durante el rodaje de la película, reproducción de la que salvó a los mineros chilenos

agua en una cavidad de la mina de sal de Nemocón

coeur illuminé en sel à la mina de sal de Nemocón
1 600 kg y 1,10 m de altura: este cristal de sal tallado no es nada menos que el más grande del mundo!

máquina de obreros llevando la sal en la mina de sal de Nemocón

Al final de este visita, nos quedamos enamorados de este pueblo que tiene tanto para ofrecer… Y no hemos terminado todavía…

Informándonos en internet, descubrimos que un desierto estaba situado cerca de Bogotá y más todavía de Nemocón. Preguntando a los habitantes y a un chófer de Tuk Tuk comó ir a pie a este desierto, nos dijeron que se encontraba un poco lejos y que ibamos a pasar el día entero para ir, visitar y luego regresar al centro del pueblo. Así que es en Tuk Tuk que nos fuimos hacia el desierto de la Tatacoita! Menos mal elegimos este modo de transporte porque tardamos como 30 minutos para ir al desierto tomando rutas de tierra y de arena sinuosas y con pocas indicaciones.

camino hacia el desierto de la tatacoita de Nemocón

casa abandonada en el camino hacia el desierto de la tatacoita de Nemocón

cactus en el camino del desierto de la tatacoita de Nemocón

cactus y zoom de la formación de arena en el desierto de la Tatacoita de Nemocón

entrada del desierto de la tatacoita de Nemocón
Después de este pórtico, continuamos a pie con nuestro chófer que nos propusó la visita

nosotros en el desierto de la tatacoita de Nemocón

desierto de la tatacoita de Nemocón

desierto de la tatacoita de Nemocón

Charles y yo en el desierto de la tatacoita de Nemocón

desierto de la tatacoita de Nemocón

desierto de la tatacoita de Nemocón

desierto de la tatacoita de Nemocón

desierto de la tatacoita de Nemocón

desierto de la tatacoita de Nemocón

desierto de la tatacoita de Nemocón

Ave encontrada en el desierto de la tatacoita de Nemocón : Zonotrichia capensis
Zonotrichia capensis

desierto de la tatacoita de Nemocón

desierto de la tatacoita de Nemocón

desierto de la tatacoita de Nemocón

zoom en la arena endurecida del desierto de la tatacoita de Nemocón

detalle de la arena del desierto de la tatacoita de Nemocón

desierto de la tatacoita de Nemocón

flor en el desierto de la tatacoita de Nemocón

gramíneas en el desierto de la tatacoita de Nemocón

saltamontes en el desierto de la tatacoita de Nemocón
Saltamontes bien escondidos en el desierto

vista del desierto de la tatacoita de Nemocón

tuk tuk que tomamos para ir al desierto de la tatacoita de Nemocón

Las imágenes hablan por ellas mismas… Es espectacular! No nos esperabamos a tanta belleza ni a tanta serenidad. Nos sentimos previlegiados en este lugar formado por la erosión y los miles de años. Y para cerrar con broche de oro: eramos los ÚNICOS! Nadie más que nosotros! El desierto de la Tatacoita, el hermano menor del desierto de la Tatacoa él úbicado en el departamento del Huila al sur de Colombia, nos dejó boquiabiertos delante de este cuadro natural!

En realidad, invertimos estas 2 visitas: paseamos por el desierto por la mañana y descubrimos la mina de Sal por la tarde, eso nos permitió evitar tener mucho calor caminando en pleno Sol.

Para resumir, Nemocón es LA joya de nuestro viaje, un descubrimiento completamente inesperado!

Es con esta última foto que los dejamos, porque vamos a presentarles pronto la ciudad de Medellín y hay mucho camino a recorrer antes de llegar…

regreso en tuk tuk hacia Nemocón

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